sábado, 28 de agosto de 2010

Allí nos encontrábamos los dos, como si fuéramos dos extraños, como sí jamás nos hubiéramos abrazado fuertemente, como si jamás hablado ni reído juntos. Por una cuestión de segundos se detuvo, como si estuviera esperando que lo saludara como de costumbre, cuando nuestras mejillas se rozaban suavemente. Pero nada sucedió, simplemente lo ignoré, seguí mi camino y ni siquiera miré su rostro: no podía seguía siendo vulnerable a su cálida mirada, a sus extraños ojos, a todo ese misterio que jamás conocería.
En ese momento solo el enojo y la sensación de traición podían pasar por mi interior, aunque nada de esto podría llegar a se odio porque, de hecho, lo seguía queriendo demasiado, pero ya nada podría ser como antes. Es que cuando algo se rompe no puede repararse: aunque lo hagas y no queden signos visibles de lo sucedido, sabes que se rompió y eso jamás puedes cambiarlo.
No me arrepiento de haberlo conocido, no me arrepiento de todo lo sucedido porque todos caemos, hasta la manzana más perfecta cae del árbol( aclaro que con eso no me refiero a mí, sino que todos caen) para nuestra suerte no somos manzanas y podemos levantarnos y caernos cuantas veces deseemos y podemos aprender de nuestras caídas o bien comenzar a caer con estilo.
Solo creo que el tiempo va a curar las heridas de cada caída, haciendo que me acostumbre a vivir con ellas.

jueves, 26 de agosto de 2010

viernes, 20 de agosto de 2010

Es así de simple: primero es bueno empezar diciendo que nada es para siempre, por más lindo que pueda parecer en un momento acaba. Así que hacer promesas eternas de amor y felicidad no sirven para nada. Por un instante, te crees en el paraíso, como si nada pudiera destruirte y al otro te clavan un puñal por la espalda y te siguen sonriendo como si no notaras la presencia de algo haciendo te una herida. Pero hay personas que son así, en pocas palabras una mierda, te hacen sentir bien y después te matan (figuradamente).
La situación es la siguiente: tengo 15 años y sé que no tengo la madurez suficiente como para hablar del amor verdadero pero al menos sé que si puedo hablar de la amistad y de los códigos.
Es algo estúpido, desde mi punto de vista, enamorar a alguien y después decir que te tiene ganas siendo que vos lo buscaste, creer que sos la última coca-cola del desierto, siendo que abrieron un bar ahí mismo. La verdad no se como les da la cara, pero siendo más precisos no tienen cara, usan mascaras para disfrazar la realidad de mierda que viven, para crear sus mundos, destruyendo los otros.
Y la verdad es esta:
Él creo una fotocopia de sí mismo con migo
El mundo no gira a su alrededor aunque me halla parecido que casi era perfecto, no se acercaba para nada
Los cuentos de hadas no existen, ¿Príncipes azules? Jájá solo en los cuentos que de chicas nos contaban
No podes olvidarte de alguien, solo aprendes a vivir sin esa persona
Comienzo a creer que están todos cortados por la misma tijera pero aún asi es inevitable seguir buscando

Tenía los ojos vendados pero la felicidad que tenia en ese momento hacia que nada me importase.
‘Yo voy a guiarte’, recordé que me había dicho él mientras tomaba mi mano delicadamente hace un tiempo atrás, simplemente comencé a seguirlo desde ese momento.
Caminaba de su mano sin siquiera ver un destello de luz, pero él me guiaba y sentía que era todo lo que tenía, todo lo que necesitaba para ser feliz. De repente soltó mi mano, dijo ‘perdón, no quiero lastimarte’ y me empujó ligeramente.
Sentí que caía a un profundo abismo, pero ya era tarde para intentar salvarme. Cuando pude quitarme las vendas estaba en un profundo lecho cubierto de espinas.
Caer sabiendo que lo estas haciendo es una extraña y dolorosa sensación, sabes que tendrás un horrible final pero te das cuenta de lo que esta sucediendo y al menos la caída no duele nada.
Pero no se compara con caer de repente. Cuando caes de repente, caes tan abruptamente que el dolor es mucho más fuerte, sientes que ya nada te queda y toda esa felicidad que sentía se acaba como por arte de magia.
Mientras estaba en ese profundo abismo cubierta de heridas y espinas, miré hacia todos los lados para intentar de hallar una salida.
‘Es solo cuestión de tiempo’ me dije, pero luego pensé otra vez en ello… ¿Era solo cuestión de tiempo para salir de allí o para caer otra vez en un abismo?